“Interesantísima cinta sobre un esquizofrénico rodada de forma muy personal”
Escrita y dirigida por Simon Rumley, que no es un habitual de género, de hecho solo esta peculiar propuesta es su única contribución hasta el momento ya que solo ha dirigido comedias de situación, pero con su toque personal. Cuenta con un elenco muy escaso, habitual del cine o series inglesas, de hecho no son habituales del género. Podríamos comentar que a Leo Bill se le vio por 28 dias después, y a Roger Lloyd-Pack se le ha visto en 1984 y U.F.O.
Donald Brocklebank se ve en la bancarrota con un hijo psicótico y una mujer enferma que no puede valerse por si misma. Cuando Donald sale por negocios James quiere encargarse de su madre, pero Donald ya ha contratado a una enfermera. James quiere demostrar a sus padres que es mayor y que puede cuidar a su madre, acabará dejando a la enfermera fuera de la casa. Pero los cuidados de James no son todo lo buenos que la madre necesita, ademas que deja de tomar su medicación lo cual le produce alucinaciones y desvaríos, tantos que hasta la vida de su madre correrá peligro.
Pues tenemos aquí una de esas cintas únicas que gustan o son odiadas, no suele haber término medio. Con un guión escueto y simple, a priori, con unas actuaciones y una dirección que consigue crear en el espectador un interès que provoca que durante los 90 minutos de metraje estemos atentos y a su vez disfrutando de esta peculiar cinta, que es deudora del cine de Jodorowsky por cierto.
Al parecer Simon Rumley se basó en su experiencia personal para escribir el libreto, el año anterior su madre murió de cáncer, realmente consiguió algo bastante original con un planteamiento cinematográfico muy acertado, ya que aunque la acción transcurra en una mansión, el cambio de habitaciones, la fotografía, los movimientos de cámara y sus encuadres y la atmósfera, consiguen crea un dinamismo bastante peculiar y acertado durante todo el metraje.
Además tenemos unas actuaciones sobresalientes, con un trío protagonista soberbio donde habría que destacarlos a todos y cada uno por separado. Increíble el papelón que nos deleita Leo Bill como trastornado, con una fuerza, una capacidad de transmitir con el gesto, increíble. Al igual que Kate Fahy con la que comparten secuencias magistrales.
Además Simon Rumley mete muchas secuencias de paranoias, que son las que supuestamente tiene James, y son la guinda de este genial pastel. Con unos planos, unas escenas creadas con gusto, psicotronía y muchísima imaginación y saber por el cine, ademas aderezadas por una, mas que acertada, banda sonora.
Por cierto, hasta veremos sangre, no a raudales ni mucho menos, pero alguna aparición del líquido rojo hay, perfectamente ubicado por cierto. Por si fuera poco el final es soberbio también, una sorpresa tras otra y, aunque el ritmo sea sosegado y pausado, tenemos un buen dinamismo y buena complicidad con el espectador, algo que ocurre en gran parte de la cinta.
Interesantísima cinta sobre un esquizofrénico rodada de forma muy personal, como es habitual en cintas de estas características tiene críticas muy desiguales, aunque ha ganado numerosos premios, pero no es una obra maestra, ni mucho menos. Es una gran cinta donde ver a un psicótico y sus reacciones, no quiero hablar mucho de la película en sí porque es mucho mejor verla, aunque es algo dura se hace totalmente disfrutable. Además al cabo de media hora escasa sabemos si nos va a entretener o no, algo de agradecer. A mi si me ha gustado.
Óscar Arias
La Mansion del Terror - 7.5
7.5
Género; Terror psicológico - Locura - Drama