Crítica- Siete muertos en el ojo del gato (1973)

“Gran giallo con toques gòticos y varias muertes”

Dirigida y co-escrita por el desaparecido Antonio Margheriti, realizador de infinidad de explotaciones, caspas y cintas de bajo presupuesto con un encanto especial, ya fuese para bien o para mal. A él le debemos tìtulos como Apocalipsis canìbal, Danza macabra, El justiciero rojo, Crimen en la residencia y un largo etc. Està protagonizada por Jane Birkin, habitual de dramas y comedias, que dentro, mas o menos, del gènero solo la hemos visto en las adaptaciones televisivas de Agatha Christie Muerte en el Nilo y Muerte bajo el sol, Hiram Keller sin embargo si participò en otras cintas de gènero, Satiricòn, Smile before death o Lifespan, el resto del elenco es habitual del cine de gènero italiano.

Corrigan es expulsada del internado y viaja a la villa de su tía Mary MacGrieff donde està pasando las vaciones su madre, lo que no sabe es que su tía le ha pedido dinero a su madre ya que tiene diversas deudas que la pueden llevar a perder la villa. Allì se hospedan su doctor de confianza, ya que su hijo Lord James parece estar desequilibrado mentalmente, una enfermera, amante del Doctor que lo es a su vez de Lady Mary y los criados. Pero una sucesiòn de muertes asolaràn la villa con un solo posible culpable, Lord James, pero Corrigan no lo cree asì, la policìa tendrà que investigar para desvelar el fatal misterio, ya que solo un gato es testigo de todas las muertes.

Interesante giallo muy gòtico, como una mezcla del giallo de Argento y los terrores de Freda o Bava, con no demasiadas escenas violentas pero si con grandes momentos de tensiòn y suspense francamente bien elaborados por Margheriti. Cuenta con una buena selecciòn de decorados, gran fotografìa y buena direcciòn de actores, lo ùnico que le reprocho tècnicamente es la abusiva incursiòn de mùsica durante todo el metraje. Una cosa es tener banda sonora, pero que en casi la totalidad del metraje tengamos mùsica de fondo desvirtúa en gran medida la cinta, que en lìneas generales es un gran trabajo terrorìfico.

Margheriti usa a su propio gato, Mushi, en esta cinta, siendo un elemento importante ya que es quien nos indica la proximidad de la siguiente muerte o escena comprometedora. Al estar ubicados en un castillo Margheriti se las apaña francamente bien para mostrarnos catacumbas, pasadizos secretos, cadáveres en alto estado de descomposiciòn y encima una labor de Jane Birkin y Hiram Keller mas que destacable, en especial Jane Birkin que borda, literalmente, su papel.

Curiosamente los asesinatos son bastante light, mas aun teniendo en cuenta que el opening de la cinta nos muestra un cadáver descompuesto que es comida de ratas, el resto seràn ataques con una navaja que, en su mayoría, están bastante mal montados aunque cumplen a la perfecciòn gracias al ambiente que crea Margheriti en cada asesinato. Y con todo el guiòn, ya que juega mucho al despiste con el espectador, con tramas cruzadas, líos amorosos, deudas, dinero, hasta mete un gorila como animal de compañía de Lord James para despistar.

Al igual que en toda la parte final, aùn metiendo a la policía un poco con calzador, siendo francamente buena, con giros, muertes y un desenlace bastante acertado y muy bièn trabajado, que nos deja un grato sabor de boca.

Gran giallo con toques gòticos y varias muertes, casi tantas como personajes, y una trama bastante simple a la vez que efectista y muy bièn tratada ya que en ningùn momento se sospecha del asesino real. Quizà esta pelìcula sea algo tardía a los terrores italianos mas destacables, o sea un giallo algo extraño en su momento porque no tiene las crìticas que creo que merece, ya que si bien no es una joya de culto es una mas que loable cinta de terror giallesco.

Óscar Arias