Crítica- Tigre y dragón (2000)

“Excepcional cinta de swordsplay que revivió el género”

Superproducciòn asiàtica dirigida por Ang Lee, director que no tenìa demasiada experiencia aunque diò el gran salto a la industria Hollywoodiense donde podemos destacar la cinta Hulk. Y basada en un cuento de Wang Dulu, de su pentalogìa. Cuenta con un elenco oriental de quilates, casi todos grandes actores ya reconocidos. Vemos al gran Chow Yun-Fat, de la saga A better tomorrow, El monje, El asesino o La maldiciòn de la flor dorada, a Michelle Yeoh, colaboradora habitual de Jackie Chan vista en La momia, la tumba del emperador, a Ziyi Zhang, Zu warriors, Hero o Musa, o a Chen Chang, Silk o Missing.

Buena sinopsis aunque algo escueta. Jiao Long robarà la espada, esta tiene relaciòn con la muerte del maestro de Li Mu que buscarà venganza y a su vez querrà instruirla ya que està bajo los influjos de su enemiga Jade Fox, la responsable de la muerte. Pero la caprichosa Jiao Long no serà facil de convencer ya que quiere vivir la vida al màximo y quiere que todos la respeten, pero un antiguo amor acabarà minàndola. La lucha final entre Li Mu y Jade Fox serà definitiva.

Genial pelìcula oriental que causò gran repercusiòn dentro de la industria cinematogràfica internacional, nunca antes se habìa prestado tanta atenciòn a estas fàbulas orientales como se hizo con esta. Se nota que era una coproducciòn ciertamente ambiciosa, ademàs logrò una enorme cantidad de premios, hasta 4 Oscars, lo cual permitiò poder exportar mas producciones de este tipo, aunque muchos hayan querido decir que èstas se rodaron a raiz del èxito de Tigre y dragòn, algo del todo falso ya que este tipo de cine es tradicional en China o Japòn.

La gran diferencia es que esta cinta pierde bastantes de los elementos còmicos y aumenta la carga dramàtica, algo que irà minando este soberbio subgènero, en mi opiniòn, ya que la ñoñerìa llega a extremos increíbles en algunas producciones.

Tenemos una calidades tècncias sobresalientes, unas coreografìas de lucha impactantes, luchas entre los tejados, ya vistas, o sobre las copas de los àrboles, uno de los mejores momentos de toda la cinta. Que si bien parte de secuenciarais ya vistas en la fantasìa oriental aquì se realiza de forma larga, pausada y con un manejo de los tempos cinematogràficos simplemente genial. Dejando al espectador boquiabierto por la grandeza de las imàgenes que està viendo, lo mismo pasa con la fabulosa banda sonora, magistral.

Los actores rinden a gran nivel, algo habitual, no obstante obtuvieron diversos premios, del todo justos. Si sumamos grandes profesionales con unos perfiles de caracteres perfectos, sin salir en exceso de las pautas del cine de Samurais y demàs, y una gran direcciòn de actores obtenemos resultados como estos, soberbios. ¿Porque los actores occidentales no cumpliràn como los orientales?

Lo que esta pelìcula si marcò fue la incursiòn, exagerada, del drama, que provoca largometrajes de gran duraciòn, esta casi dos horas, y muchos momentos excesivamente dramàticos y romànticos que no me acaban de cuadrar. Aunque es de los mas llamativo, al parecer, de este tipo de producciones, pero yo querrìa mas luchas y mas acciòn, si todavìa mas…jajaja

Otro gran punto a su favor es lo bien que entrelazan las historias de cada uno de los personajes, lo que nos deja ver un buen trabajo de guiòn, aunque esta, una vez màs, tenga un final dramàtico que a mi me deja algo descolocado. Pero en definitiva es parte de este, MAGESTUOSO, gènero cinematogràfico.

Tigre y dragòn, la pelìcula oriental del siglo XXI que “reinventò” el gènero de espadas, aunque serìa mas correcto decir que fuè la que abriò las puertas del cine fantàstico oriental al extranjero, algo de lo que nos hemos beneficiado los espectadores que disfrutamos de este cine. Decir a todos aquellos que “pasan” de ver a chinos saltarines, que se estàn perdiendo unas joyas cinematogràficas de gran envergadura. Solo apuntar, tanto este estilo de cine como los fantasmas con pelos en la cara son tradicionales de China o Japòn, y llevan vièndose dècadas. Del todo recomendada, aunque posteriormente hayan aparecido producciones superiores, en especial Hero, la gran joya de la corona.

Óscar Arias