Crítica- El enigma del cuervo (2012)

“Pastiche de géneros con un Edgar Allan Poe como protagonista siguiendo a un asesino en serie brutal”

La noticia de una película de misterio y asesinos en serie con todo un Edgar Allan Poe como protagonista no sentó muy bien, a priori, en el seno de los aficionados al fantástico. Y es que desde el majestuoso ciclo Corman- Price nadie ha sabido trasladar nada relacionado al genio de Baltimore a la pantalla con maestría. Pero aquí apareció James McTeigue, quien ya rodase, al amparo de los hermanos Wachowski, V de Vendetta y Ninja assasin, por lo que las expectativas de poder ver una cinta clásica se desvanecían. Al tiempo se pudo saber del libreto, obra de la dupla Ben Livingston y Hannah Shakespeare, donde se colocaba a Poe como un ayudante de la policía en una investigación sobre un asesino en serie que usa sus relatos para sus macabros asesinatos. Pues bien, este curioso argumento sumado a la participación de actores de renombre, tipo John Cusack, veterano actor al que recodamos de las recientes 2012, o 1408, Luke Evans, recientemente visto en Immortals, la joven Alice Eve, Kevin McNally, de la saga Piratas del Caribe, o el siempre interesante Brendan Gleeson, y un amplio presupuesto nos hacían esperar algo, al menos, interesante. Apuntar que es una coproducción española, menuda sorpresa…

¿Y con qué nos encontramos? Con un refrito bastante mal empastado que entremezcla tantos elementos del cine moderno, en plan antiguo, que no consigue mantener una continuidad que mantenga al espectador atento a todo lo que acontece durante el metraje. Así la dirección artística, siendo interesante, parece muy de “telefilm”, no están muy bien tratada, o la fotografía, que no ayuda a crear una atmósfera adecuada en los paisajes del Baltimore del S.XIX. De hecho se echa de menos algún que otro decorado poderoso, la imperecedera sombra del mágico ciclo Poe- Corman sobrevuela en todo momento, y en esta comparación el señor McTeigue suspende estrepitosamente.

La banda sonora, por otro lado, cumple sin más. Y es que es la dirección lo más flojo de este título, y lo es debido a lo poco clásica de la misma. De hecho McTeigue parece más cómodo en las escenas de acción o violentas.

Además, el hilo argumental está cogido de pinzas, y no tiene demasiada consistencia. Ya la sola presentación de los diversos personajes es sosa y simplona. No di crédito a la mala personificación que se hace del genio de Baltimore, más allá de su relación con Emily Hamilton, la cual está vacía y solo aporta unión a la trama del asesino en serie y el propio personaje. Ya que la trama policial deja, igualmente, mucho que desear.

Pero empecemos desde el principio. Cusack no da el tipo como Poe, de hecho recuerda estrepitosamente al Nicolas Cage más flojo, y en partes mejores al de Living las Vegas, y aunque intenta salvar su personaje no llega a conseguirlo. El libreto es incoherente y a cualquier aficionado de la obra de Poe, como el que escribe, le sabrá a poco, muy poco. De hecho las diversas menciones a la obra de Poe no tienen el suficiente peso, y aunque algún asesinato nos haga esperar algo mejor, esto no pasa nunca.

Así estamos ante un thriller policial con un asesino en serie tomando como reclamo comercial la figura de Edgar Allan Poe, ni más ni menos.

Afortunadamente no todo es negativo. Las muertes, algunas realmente gráficas y violentas, gracias McTeigue, brillan a un gran nivel, al igual que algún detalle, suelto, acerca de la obra de Poe. E igualmente destacan algunos de los secundarios, de hecho las mejores interpretaciones son las de Kevin McNally y Brendan Gleeson, descaradamente la mejor interpretación de toda la cinta.

Porque Cusack está sin estar y no le coge el tino al personaje, aún intentándolo. Alice Eve pasa del todo desapercibida con esa cara angelical de la cual abusa. Y el bueno de Luke Evans hace todo lo que puede por darle empaque a un personaje vacío que debió estar mejor perfilado.

Pero, siempre hay un pero, la cinta es realmente dinámica. La trama no se detiene en ningún momento y siempre se suceden cosas importantes en la película, gran acierto y gran sorpresa. Por lo que este elemento hace su visionado mucho más agradable y ameno, uno es seguidor de Poe y todo lo que huele a él siempre llama la atención. Así, si muchos elementos dejan a uno algo enfadado, la globalidad de la cinta, al menos, aprueba. Eso sí, los guiños a cintas como Los crímenes de la calle Morgue, o El pozo y el péndulo quedan mal. De hecho resultan superiores los detalles sacados de Enterrado, hay un par de planos calcados a la cinta de Cortés, o la última saga de Sherlock Holmes, entre otros.

Y para más inri la resolución es deudora del estilo que instauró Seven en los noventa. Por lo que podemos imaginarnos del tipo del que hablamos, ¿no?

En definitiva, un título entretenido y poco, muy poco, mas. Quizá le sobre toda esa mezcla de géneros, tales como el thriller, el cine policíaco, romántica, asesino en serie, gore, pseudo giallo y hasta Torture porn… Si es que es un mejunje muy difícil de clasificar. De todos modos, es un título que cumple sin mayores pretensiones, McTeigue debe empezar a demostrar bastante más, ya que la dirección es posiblemente lo más flojo de la cinta. Eso sí, los títulos de crédito, tanto iniciales como finales, son muy buenos. Si es que se nota que ese es el estilo de McTeigue.

Óscar Arias