Crítica- I dismember mama (1974)

“Asesino en serie con tintes de pre slasher algo menor”

Dirigida por Paul Leder, quien rodase diversos dramas sobre asesinos, My friends need killing, El estrangulador, Murder by numbers, The baby doll murder o Killing obsesion, y sin olvidar la mìtica APE que tambièn producirìa. El elenco era habitual de las series de televisión donde ademàs prosiguieron sus carreras la gran mayorìa. Cabrìa destacar a Joanne Moore Jordan que trabajò en The Dunwich horror.

Albert esta internado en una clìnica por problemas mentales, tratò de asesinar a su madre. El doctor del centro comenta a su madre que deben internarlo en un manicomio ya que se està volviendo peligroso justamente cuando Albert se escapa asesinando a un enfermero. Irà a su casa donde encontrarà a la asistenta a quien asesinarà también, pero esta tiene una hija, Annie, a quien Albert engañarà y se la llevarà con el ya que cree que es la ùnica mujer pura, todas las demas merecen morir. Pero tarde o temprano Annie descubrirà la verdadera faceta de Albert.

Pelìcula setentera de bajo presupuesto que fuè publicitada como una cinta sangrienta y que se recomendaba ver con una bolsa para los vòmitos por su extrema violencia gràfica, algo habitual, por otra parte, de bastantes cintas de la època. Pero esta no tiene esa cantidad de gore avisado ni mucho menos. Nos encontramos mas bien con una cinta donde vemos los devenires de un psicòpata que està obsesionado con asesinar a su madre y que todas las mujeres son putas.

El guiòn es simple, no tiene nada destacable y sí quizà algunas lagunas pero como se notan tanto los distintos fallos tècnicos casi obviamos la falta de guiòn. Porque la fotografìa es calamitosa, vemos hasta las sombras de los càmaras pasar por los protagonistas, la atmòsfera nunca se consigue, hay planos como borrosos y la direcciòn de actores parece nula.

Al menos las actuaciones cumplen, destacando el dúo protagonista. Zooey Hall que realiza una interesante interpretaciòn como psicòpata aunque se le ve algo perdido durante el rodaje y se le nota que busca momentos de lucimiento personal, y Geri Reischi que interpreta a la niña de forma aceptable aunque su papel està del todo desaprovechado y podrìa haber dado mucho mas juego. Sobretodo siguiendo los planteamientos de Albert que hasta dice que està enamorado de ella.

Hay muy poco gore, o casi inexistente, y solo vemos planos de gente asesinada y ya, nada explìcito. Y eso que siempre se ha dicho de esta cinta que era muy gore aunque quizà sea mi copia. Pero revisè una en V.O. y era igual.

El final es algo calamitoso y si bien se consigue crear una atmòsfera, por una vez, interesante, destacable la secuencia de los maniquíes tantas veces vista despuès, el rodaje acaba por estropear el momento cumbre y cuando ya Annie descubre que Albert es un asesino y todo lo que sucede a posterior queda muy espeso y da la sensaciòn de haber un batiburrillo de ideas. Ademàs de ser inexplicable el como aparece en el lugar justo el sargento de policía. Cosas del cine.

Pre Slasher, con mucho drama, de bajo presupuesto que es algo desangelado por su falta de ritmo y pretensiones, quizà la incursiòn de la sangre prometida en los carteles hubiese elevado la calidad de la cinta, pero es algo que no sucede. Eso sì, el tìtulo es muy llamativo y estamos durante todo el metraje esperando que alguien desmiembre a alguien pero nos quedaremos con las ganas, y es que es mejor tìtulo el de Poor Albert and little Annie, por el que es mas conocida. En España se pasó como “Tras la puerta del miedo”.

Óscar Arias