Crítica- The corpse grinders (1972)

“Gatos caníbales de Serie Z”

Uno de los clàsicos de Ted V. Mikels, quièn en el año 2000 rodò su esperada secuela. Recordemos que Mikels es uno de los reyes de la serie Z Norteamericana, al cual debemos “joyas” como The astro-zombies, Blood orgy of the she- devils o Markof the astro-zombies. Con un elenco desconocido, en su mayorìa, podemos destacar a varios actores que participaron en otras cintas de Mikels, como Vincent Barbi y Sherri Vernon, Blood orgy of the she- devils, Harry Lovejoy, Girls in glod boots, o Ray Dannis, The black Klansman. Ademàs Ray Dannis y Charles Fox participaron en The undertaker and his pals, tambièn recordar que Sean Kenney trabajò en The toy box, The Manson massacre y Cicle psycho.

Landau y su socio Maltby regentan una empresa de comida para gatos, pero como el negocio va mal deciden pagar a un pobre hombre para que les proporcione cadàveres que trituran y sirven como alimento de gatos, pero los gatos comenzaràn a atacar a sus dueños y el Dr. Howard Glass y su ayudante Angie comenzaràn a investigar. Prontò sospecharàn de Landau y su socio que ademàs se desharán de sus compradores, asì comenzaràn a usar cadàveres asesinados por ellos para realizar el alimento para gatos. Angie tratarà de desenmascararlos, aunque no serà tarea facil.

Otra de las explotaciones de Ted V. Mikels, que de nuevo contando con un presupuesto cuasi inexistente consigue realizar una pelìcula de unos 74 minutos. Esta vez tiene un guiòn bastante interesante, la pena es que el presupuesto no le acompaña y aunque sea una cinta considerada gore no lo es. Le falta mucho gore para tener ese estatus.

Lo que si vemos son diversos trozos humanos, algunos mejor realizados que otros y una papilla bastante graciosa que sale de la máquina trituradora. Las calidades tècnicas son similares a sus otras cintas dentro del gènero, con colores chillones, planos fijos, pocos actores, diàlogos bastante pobres, secuencias hinchadas sin necesidad, cambios de fotografìa, exagerados, dependiendo si se rueda de dia o de noche, quizàs usasen un par de focos para todo, etc.

De esta cinta siempre me encantò el trailer promocional, el bueno de Ted V. Mikels sabìa como distribuir sus trabajos. Aùn siendo serie Z tienen un encanto especial, aunque tambièn reconozco que a Mikels se le recuerda mas por lo malo de estos trabajos dentro del gènero, y de sus otras explotaciones, que por otros motivos. A mi es un director que me resulta simpàtico, deudor del estilo de Ed Wood Jr., y con mas mal gusto, le tocò vivir otra època.

Es muy divertido ver los ataques gatunos, no tienen precio, o ver algunas actrices enseñando palmito, siempre con ropa interior, sin venir demasiado a cuento, !Hasta veremos un pseudo intento de violaciòn¡

Las actuaciones son habituales de este tipo de cine, apresuradas, sobreactuadas y a veces sin sentido, pero es lo que hay, y es entretenido. No es cine para todos los gustos ni mucho menos, aunque a muchos les encante criticar estos trabajos sin ni si quiera haberlos visto.

Mikels tambièn se atreve a introducir elementos còmicos, sobretodo en el papel del Enterrador, con varios momentos de humor negro, que a la par sirve de medio homenaje a The undertaker and his pals. Sus secuencias son mas oscuras y se introduce la niebla, algo curioso que podrìa haber explotado mas.

La parte final es clàsica de este tipo de cine, con todas y cada una de las pautas ya establecidas. Chica gritando, malo que mata a su compañero, el bueno que es disparado y el poli de turno que acaba con todo, para, como no, dejarnos un plano final con, esta vez, gatitos encima de un cadáver. Que tìpico. !Y que divertido¡

Otra serie Z de Ted V. Mikels, siendo esta una de sus obras mas recordadas, quizà por su formidable tìtulo y exquisita portada. Aunque, siendo francos, la secuela rodada hace poco tiempo es bastante superior, mas irreverente, con decenas de homenajes y muy simpàtica. Aparte, le pondrè un pero, nunca entenderè porque a Mikels se le considera tanto y a gente como Dohler, Schiff o Bechard no. ¿Marketing? Seguramente, recordemos que con Ed Wood Jr. pasò exactamente lo mismo. Devoradores de Serie Z, no os la perdáis.

Óscar Arias