Crítica- D-war (2007)

“Kaiju coreano menor, muchos efectos pero poco de lo demás”

Dirigida por Hyung-rae Shim, que ya dirigió Tyrano´s claw o Yongari, y con un elenco mayoritariamente estadounidense, llega esta superproducción coreana que tardó en rodarse casi diez años.

La sinopsis, por una vez, es más que acertada, solo decir que Ethan sabe desde el principio cual es su destino, que ya se lo dijo Jack cuando era solo un niño, y aún así intentará salvar a Sarah y volver a dejar el problema a la gente del futuro.

Hay bastante que decir sobre esta cinta, que esperaba con muchas ganas debido a la decepción que me causó la sobrevalorada “The host”. Pero es que esta es peor, si así es. Bien es cierto que es espectacular, grandísimos efectos especiales, pero nada más. Vamos, que las cintas de Godzilla de los 60 son mas divertidas que esta. Iré por partes. El guión es un sinsentido y tiene lagunas enormes, aparte que es gracioso ver a los yankes dominando las leyendas coreanas, eso sí que es poco creíble. Las actuaciones son bastante pobres, en especial la de la mayoría de secundarios. Aunque quizá se deba mas a la dirección artística que a los propios actores, y la dirección en general es bastante desacertada. No se consigue la atmósfera necesaria casi en ningún momento. Por momentos da la sensación de haberse pegado secuencias para llegar al metraje final, una hora y veintidós minutos.

Si es cierto que la parte donde el ejercito se enfrenta a los monstruos es espectacular, lo mejor de la cinta con mucha diferencia, pero recuerda demasiado a los productos típicos USA. Grabación tipo Pearl Harbor, mezclando al señor de los anillos, y el espíritu del Kaiju, con su demonio divino destruyendo una ciudad aunque esta vez acompañado de diversos animales y su ejercito a prueba de balas. Y un final algo loco, muy espectacular pero sin sentido alguno. ¿Porque el medallón de Ethan destruye de repente a todo el ejercito? Menos mal que en esta década aparecieron grandes cintas de Godzilla, sino el kaiju caería empicado. Una autentica lástima.

También hay que reconocer que los monstruos están muy logrados, y da gusto ver bastantes ataques del Imogi y la destrucción que provoca. Al menos eso si está cuidado. Aparte hay que comentar que el proceso de creación de la cinta duró diez años, ya que, al parecer, pasaron por diversos problemas. Aunque creo que diez años es una cifra muy exagerada.

Entonces me queda un pregunta, si tardaron tanto, con un presupuesto enorme, de las cintas más caras rodadas en Corea del Sur, ¿porque el resultado final no es mejor? ¿Y porque hay tantas incongruencias? Y podría seguir. Pero en el fondo la cinta me entretuvo, aunque me decepcionase, cosa a tener en cuenta, ya que es lo primordial en una película.

Vamos, una cinta para ver y disfrutar, si no se espera nada del otro mundo. Es un kaiju distinto, y que tiene multitud de errores, pero que aún así entretiene durante su corto metraje. En el que te vendrán a la mente infinidad de cintas con grandes producciones, tipo El señor de los anillos, Pearl harbor, y, evidentemente, la saga de Godzilla, pero sin llegarle a la suela de los zapatos. Después de esta y “The host” espero otra secuela de Godzilla, que es realmente quien está levantando el Kaiju actual, sin olvidar a la gran Gamera the brave.

Óscar Arias