“Serie B floja que no bodrio”
El especialista en efectos especiales, eventual actor de reparto y hasta montador y escritor, Ray Kellogg dirigió en 1959 dos películas dentro de la serie B de la época, esta que nos ocupa y The giant Gila monster, siendo ambas títulos menores y muy cercanos al universo de la serie. Mas aún viendo los grandes trabajos de efectos especiales que realizó Kellogg en cintas como Ultimátum a la Tierra, 1951, o Niágara, 1953. Contando con un elenco escaso, faltaría menos, encabezado por James Best, visto por Corredor sin retorno, 1963, o The brain machine, 1972, que está acompañado de habituales secundarios o actores noveles, como el propio productor, Kevin Curtis, que también participó en Don Daredevil rides again, 1951, o The giant Gila monster, 1959, o el productor ejecutivo, Gordon McLendon, que realiza su única incursión como actor en esta cinta. Aparte tenemos a Ingrid Goude y Baruch Lumet, vistos en algún serial de la época o en roles menores.
La sinopsis vista en el DVD es totalmente falsa. El capitán Thorne Sherman viajará a una isla a llevar provisiones y recoger unos pasajeros de vuelta de una investigación científica, pero un huracán le coge de improvisto y tiene que pasar allí la noche. Allí Ann Craigis, hija del Dr. Marlowe Craigis, le contará en que investiga su padre, trata de resolver el futuro problema de la superpoblación mundial mediante el encogimiento de los seres vivos para que así haya menor gasto de los recursos, pero algo salió mal y ahora unas musarañas del tamaño de un lobo les quieren dar caza para alimentarse.
El productor Ken Curtis y el responsable de efectos especiales Ray Kellogg se unieron para rodar dos producciones de bajo presupuesto, tan en boga en la época. Con monstruos gigantes pero teniendo un detalle en común, el uso de animales reales, aunque algo caracterizados, como es el caso de estas musarañas que no son mas que perros con pelo postizo y colmillos, y decorados pequeños para la buena conjunción con el resto de planos, los correspondientes a los humanos.
Lástima que el guión sea tan flojito, aunque en esta que nos ocupa tenemos un claro mensaje social, la lucha contra la superpoblación. Algo que en la época sonaría a chino pero que a día de hoy, 70 años después, es del todo actual. Aparte las calidades técnicas son bajas, las secuencias de noche ni se ven y las de día parece que solo usan la luz día, vamos cero presupuesto en iluminación. Al igual que pasa con la banda sonora, que parece inexistente, o el montaje que parece estar realizado en un par de jornadas, poco mas.
Los personajes son del todo típicos de la serie B de la década, estamos en la época dorada de este género, y, en cierto modo, tiene diversos elementos que usaría el gran Romero en su gran La noche de los muertos vivientes, 1968. Con unos personajes encerrados en una casa que están atacados por seres de pesadilla, con el “héroe”, en este caso un capitán, interpretado de forma correcta aunque algo sobreactuada por James Best, y su némesis, en este caso el hombre que quiere quedarse con la mujer, que obviamente acabará con nuestro “héroe”, interpretado de forma correcta, que no es poco, por el productor Ken Curtis. Apuntar que el ayudante del capitán Sherman es negro y que será el primero en morir, en contrapunto con la obra de Romero.
El Mad Doctor de turno está muy poco explotado y la excusa de su experimento queda algo cogida por pinzas cuando daba mucho más de sí, aunque esto lo digo en pleno siglo XXI, ya que, seguramente, en la época no era demasiado preocupante, como ya comenté. Además el tema de la miniaturización ya se vió en otros títulos, Bert I. Gordon ya había dirigido alguna cinta de Serie B sobre el tema, y el presupuesto de esta impediría, seguro, poder usar estos elementos de seres pequeños, una pena.
El animal escogido como amenaza es la musaraña, el mamífero carnívoro mas pequeño conocido, que mutarán al tamaño de un perro, la musaraña real mide entre 5 y 9 cm. Por lo que el crecimiento es muy elevado, lástima que se noten tanto los “efectos”, de hecho en las tomas aéreas del grupo de musarañas gigantes se nota en exceso que son jaurías de perros, que encima no están nada organizados, gran fallo del responsable en cuestión.
Al menos Ray Kellogg decide rodar primeros planos de las musarañas pero tapadas por el atrezzo de la casa, ya sea carpintería o pared, gran acierto. Además los primeros planos de estas musarañas son bastante potentes y están rodados con gran fuerza.
El tramo final no tiene desperdicio, tiene tensión y un rodaje bastante dinámico aunque el bajo presupuesto no ayude en absoluto, quizá Kellogg quería hacer algo mas potente pero no recordó que estaba rodando un bajo presupuesto. Así la muerte de Jerry resulta bastante floja, al igual que la resolución, que nos deja con ganas de mas, o de una explicación no tan simple y, en cierto modo, absurda.
Serie B que mezcla animales gigantes, aquí musarañas del tamaño de un perro, mad doctor, que trata de luchar contra la superpoblación, y tensión, al ubicar la acción en una isla desierta y, especialmente, en el interior de una casa. Esta está considerada una de las peores 50 películas de la historia, algo que es del todo falso ya que siendo una serie B resulta bastante entretenida y no es un bodrio como otras cintas con gran presupuesto y sin nada de originalidad ni fuerza, y, otra cosa no, pero Kellogg demostró ganas en ambas cintas de Serie B, esta y The giant Gila Monster. Además, estas musarañas son mas interesantes que el monstruo de Gila.
Óscar Arias
La Mansion del Terror - 4.9
4.9
Género; Mutación - Mad Doctor - Animales - Serie B
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