Crítica- Dos menos uno tres (1968)

“Giallo menor que amas u odias, y yo no la amo”

Del director Giulio Questi, responsable de Arcana, Oro maldito o Vampirismus y con actores de la talla de Gina Lollobrigida, poco se puede decir de este mito del cine italiano, o Jean-Louis Trintignant al que hemos visto en Trans-Europ-Express o Asì de dulce, así de perversa, tenemos este raro giallo.

Anna es la propietaria de una granja de gallinas, y tiene a su marido, Marco, casi como títere trabajando en la empresa de ella. Este para desquitarse asesina a prostitutas en un motel, pero no realmente. Al mismo tiempo tenemos a la “hija adoptiva” de Anna, Gabrielle, que está liada con Marco, o eso parece. Y tenemos una empresa que quiere revalorizar el mercado de las gallinas, con un doctor, que trabaja en casa de Anna, en su granja, experimentando para conseguir la gallina perfecta y un nuevo comercial. Que ayudará a Marco con las nuevas campañas publicitarias. Pero resulta que Anna tiene muchísimo dinero, y su herencia es muy llamativa.

Pues después de este batiburrilo de ideas tenemos un giallo bastante rarito, con una música muy desconcertante pero que queda realmente bien. Al igual que la dirección y la actuación de los actores, salvo quizá Mondaini que se me hizo algo frió. La atmósfera está bastante conseguida.

Aún así me pareció algo aburrido y con diversos sinsentidos. No solo por los cambios argumentales, tan interesantes en el giallo, que no en este, sino por las formas y los resultados. Es decir, la primera parte de la cinta crea expectación, pero a la que se nos va mostrando las razones de todo, pierde fuerza y sentido. Y el final me parece muy plano y mal narrado, además, nos deja con ganas de unos minutos más. Quizá sea la versión que vi, tendré que chequearlo. Porque realmente no me puedo creer que tenga ese final, aunque leyendo otros comentarios me da que es así.

Por lo que me parece una cinta prometedora en sus comienzos pero que va decayendo en una cinta sin fondo. Con algunas escenas muy interesantes, como la secuencia íntegra de los pollos creados a base de experimentos, sin cabeza ni plumas y con más carne, que Marco termina destruyendo y que le costará su puesto de trabajo. Porque era un bien para toda la sociedad(¿¿??). Increíble si. Y aunque la cinta tiene sus buenos momentos, como cuando se resuelve el misterio de Marco en el motel, el final, para mi gusto, es bastante malo.

Quizá es como leí en una crítica, esta cinta o la odias y la amas, y yo casi estoy mas cerca de odiarla que que otra cosa. Aunque le reconozco una buena música y actuaciones, pero en el computo general me decepcionó, que se le va ha hacer.

Óscar Arias