Reseña Bolsilibro- El diablo de Notre Dame (1987)

“Pacto con el diablo y un tren fantasma en una aventura de unas amigas que cumple con creces”

“El diablo de Notre Dame” es el cuarto ejemplar de la colección de bolsilibros de terror llamada “Escalofríos” que editó la Editorial Olimpic, propiedad del autor Ralhp Barby, pseudónimo de Rafael Barberán Domínguez, el cual se encargó de escribir todas las novelas que componen esta colección, y que provenía de la famosa “Selección Terror”, entre otras, de la mítica Brugera.

Aunque, en realidad, la autoría corresponde al autor y a su mujer, Àngels Gimeno, ya que ambos compartían pseudónimo, tanto en esta colección como en otras en las que trabajaron. Habitualmente Àngels se encargaba de la corrección, pero en otras ocasiones también se encargaba de la escritura.

Este cuarto ejemplar entremezcla argumentos conocidos por los aficionados al cine y a la literatura de terror, especialmente debido esto a la inclusión de Notre Dame, ya desde su título. Pero es que el devenir de la historia también nos resulta reconocible, aunque hay que apuntar que la mayoría de estas historias barajaban tramas ya conocidas, pero siendo estas moldeadas de forma en que el lector se sintiese a gusto con lo que leía, por familiar, y acabase con un buen sabor de boca. Algo muy habitual dentro de estas colecciones, y uno de los motivos pro las que fueron tan populares, aparte de su rápido consumo al contar con escasas páginas.

Y es que estamos ante novelitas de casi cien páginas, que se devoran en escasas horas. De hecho la lectura de esta “El diablo de Notre Dame” resulta dinámica gracias al ritmo de la escritura, la cual no carece de detalles y de ritmo, algo que destacar y que es un elemento común del autor. Autor al cual seguir la pista, sin lugar tipo de duda.

En esta ocasión nos cuentan la historia de tres amigas que viajan a visitar a otra que quedó recluida en un psiquiátrico. Al salir de visitarla acabarán conociendo el tren donde la amiga quedó traumatizada y vivirán una experiencia de terror en un pueblo mitad fantasma mitad real. Y es que tampoco se puede, ni debe, contar mucho más de la historia. Ya que, como apuntaba, esta es corta, y las sorpresas son continúas. De hecho tendremos fantasmas, engaños, médiums, pactos con el diablo, y diversas sorpresas hasta acabar en un final más que aceptable.

Y sí, no es demasiado original, leída la novela casi treinta años después de haber sido escrita, por cierto, pero cumple con creces. Así la aventura de Valerie y sus dos amigas, nos dejarán con ganas de devorar más novelitas de esta colección, “Escalofríos”. De las cuáles irán apareciendo sus reseñas en esta vuestra “La Mansión del Terror”.