“Correcto telefilm setentero sobre sectas satánicas”
Otro telefilm setentero sobre sectas satánicas, en esta ocasión dirigido por el habitual realizador de telefilms David Lowell Rich, el cual dentro del género también rodó The horror at 37.000 feet,[1973]. El guión es de Arthur A. Ross, uno de los guionista de la mítica La mujer y el monstruo, y su productor es todo un Aaron Spelling. Además el elenco es de categoría, algo habitual dentro de los telefilms de la época, así vemos a dos futuras Ángeles de Charlie, Kate Jackson y Cheril Ladd. Ambas participaron en diversas películas de género, así Kate Jackson participó en Abejas asesinas,[1974], o Una luz en la oscuridad,[1971], y Cheril Ladd en Jekyll & Hyde,[1990], o Lisa,[1989].
También vemos a Pamela Franklin, protagonista de este título a la que también hemos visto en La leyenda de la casa del infierno,[1973], o El hechicero,[1972], a Roy Thinnes,[Black noon, 1971], Lloyd Bochner,[El terror de Dunwich, 1970], Jamie Smith-Jackson,[Muerte en la noche, 1978], Frank Marth,[Fright, 1956], o Gwynne Gilford,[Fundido a negro, 1980].
Elizabeth Sayers decide ir al internado donde residía su hermana y del cual escapó antes de suicidarse, ella no cree que se suicidase e irá para investigar el lugar, el internado de Salem. Allí verá cosas extrañas, y poco a poco irán apareciendo nuevas internas muertas, así se unirá con Roberta para investigar todo, aunque parece que un culto satánico, encabezado por el propio Satán tiene planes en el internado.
La década de los setenta tubo como máximo exponente dentro del cine de terror las sectas satánicas, exorcismos y casas encantadas, así salieron a la luz, ya que todas las productoras querían sumarse al carro, infinidad de telefilms o cintas de bajo presupuesto que tocaban el tema. A estos telefilms corresponde la cinta que nos ocupa, la cual forma parte de la factoría de Aaron Spelling, por lo que la presuponemos buenas calidades y acabados, siendo un telefilm, ojo.
Y ciertamente tenemos buenas calidades y una dirección aceptable aunque con algunos altibajos en el ritmo junto a alguna pequeña licencia que empeora los resultados finales. Además de rodar un final sin fuerza, grandísimo error por parte de David Lowell Rich, por cierto, además, la banda sonora debió tener algo mas de repercusión, parece metida con calzador, sin prestar nada de atención en la misma.
Los perfiles son algo típicos dentro de este subgénero, tanto las alumnas, la hermana, las alumnas en las que confía esta, la directora, los distintos profesores, no sorprenden en absoluto. Aunque en el tramo final se intente hacerlo, sin conseguirlo. Al menos todas las actuaciones son buenas, hay que reconocer que los actores norteamericanos que rodaban telefilms eran muy buenos y grandes profesionales.
Lo malo de este título es que se desinfla por momentos, si bien tenemos alguna secuencia que sube la tensión de la cinta acto seguido pasamos a otra secuencia totalmente innecesaria que no aporta nada mas que sacarnos de la propia trama. Los momentos tensos podrían haber estado algo mas estirados y forzados, ya que siendo interesantes les falta algo mas. Ya sea fuerza o mala leche, algo complicado al tratarse de un telefilm, o algo de líquido rojo. Líquido este que no aparece en ningún momento del metraje, aunque, al menos, la fotografía si ayuda en la creación de atmósferas terroríficas, aunque se apaguen con demasiada premura.
Comentar que el internado se llama Salem ¿Cuantas veces se habrá utilizado este nombre en películas de género? Realmente podría hacerse un estudio al respecto, el cual sería amplio y abarcaría, sin duda alguna, mucha información y títulos.
La resolución es interesante, algo deudora del cine de la Hammer, por cierto, pero está mal desarrollada, dirigida y montada. Parece que David Lowell Rich quería finiquitar la trama lo mas rápido posible y su resolución es del todo fugaz, dejando al espectador algo sorprendido al no estirar algo mas las explicaciones o el momento ciertamente terrorífico. Eso sí, al menos uno de los momentos finales tendremos un efecto especial, cutre pero que ayuda a finiquitar la trama.
Otro telefilm interesante setentero que toca el tema de las sectas satánicas, mezclando elementos de la Hammer, o las recientes, en la época, sorpresas sobre el subgénero. A la cinta le falta algo mas de mala leche, algo que pasa en demasía en las producciones de Spelling, quien realizó muchas incursiones en el género pero habitualmente muy cobardes. Eso sí, se distribuyeron muy bien ya que eran telefilms y, claro, no podemos pedir a un telefilm mucha mala leche. La película tiene un visionado, aunque no es nada del otro mundo.
Óscar Arias
La Mansion del Terror - 5.5
5.5
Género; Satanismo - Secta