Home / Críticas / Crítica- Solomon Kane (2009)

Crítica- Solomon Kane (2009)

“Floja primera incursión de un personaje que da para mucho mas”

El escritor Robert E. Howard es de todos conocidos gracias a su mítico personaje Conan, pero también fué creador de otros tantos guerreros, siendo uno de ellos este Solomon Kane, el cual, curiosamente, no había sido llevado todavía a la gran pantalla,. Los cómics de Kane juegan en una liga distinta a los de Conan, así es menos conocido por el aficionado medio.

Fué entonces Michael J. Basset, director de la interesante Deathwatch, 2000, quién decidió adaptar al personaje con la idea de realizar una trilogía. Así nos llega esta producción donde participa Samuel Hadida, productor de Resident evil, 2002, a la cual algunos ineptos tratan de Serie B cuando ha tenido un presupuesto de 40- 45 millones de dólares. Si esto fuese así la Serie B real, la del bajo presupuesto, sería cine amateur o peor, ¿no?.

El escogido para interpretar al guerrero fué el inglés James Purefoy, que se ha dejado ver por Resident evil, 2002, por lo que era conocido de la producción, o Frankenstein, 2007. Está acompañado de actores de la talla de Max Von Sydow, mítico padre Merrin de la imprescindible El exorcista, 1973, y que ha participado en no pocos productos de género, de Pete Postlethwaite, sempiterno secundario visto en Corazón de dragón, 1996, o Parque jurásico 2, 1997, o Jason Flemyng, que ha participado en Snatch, 2000, o Reflejos, 2008, o de la joven Rachel Hurd-Wood, recientemente vista en El retrato de Dorian Gray, 2009, aparte de un amplio elenco norteamericano que se ve fácilmente por la meca del cine, Hollywood.

En esta primera entrega se nos cuenta como Solomon Kane comienza su leyenda luchando contra las fuerzas del mal, antes había sido un ladrón, un mercenario, un asesino, pero cuando el Diablo quiso apoderarse de su alma este se negó teniendo así una vida para redimirse y tratar de combatir a las fuerzas del mal. Así debe hacer frente al mago que ha destrozado a su familia, Malachi, a la par de tratar de salvar a Meredith, la hija del único hombre que trató de ayudarle.

Parece ser que Michael J. Basset había visto y estudiado todas las últimas producciones con aspectos similares a este su Solomon Kane antes de realizar su cinta, las continuáis semejanzas que vemos con películas como Van Helsing, 2004, o la trilogía del señor de los anillos, por citar solo dos, son apabullantes y juegan un flaco favor a esta producción que es a todas luces menor a las antes mencionadas. De hecho partiendo desde el guión esta cinta demuestra bien poco.

La historia está contada de una forma intermitente, sin ritmo y con excesivas pausas del todo innecesarias, además Basset no demuestra lo buen director que es, que lo es. No es capaz de realizar una cinta de Espada y brujería valiente, quedándose mitad de camino de ninguna parte, porque si bien las calidades técnicas son buenas, no obstante tenemos un amplio presupuesto para realizar efectos digitales, que encima están excesivamente usados quedando algo cantosos durante gran parte del metraje y dando sensación de videojuego en otros, el montaje y la dirección no saben sacarlas el partido adecuado.

Otro de los puntos negros de esta producción es la floja, alarmantemente floja, interpretación de su personaje principal. Entre que James Purefoy realiza una actuación floja, sin fuerza y que trata de crear un híbrido entre un Van Helsing o un Aragorn, quedando bastante cutre, y Basset que no es capaz de sacarle en un plano con todo su poderío, nos dejan un guerrero apático y con poco que mostrar. Es mas, hasta en sus luchas no demuestra ser todo un killer, sino más bien un guerrero afortunado que no da por perdida una pelea, es decir que no conjunta lo que dice con lo que hace. Siempre dicen que es el mejor y luego lo demuestra a trompicones, no se, esto me dejó bastante perplejo.

El resto del elenco cumple, que menos teniendo en cuenta el nivel del mismo, lo malo es que Basset no saca provecho a diversos personajes. Así Von Sydow pasa sin mayor pena ni gloria, o James Purefoy, cuyo personaje, que es el malo de todo el asunto, no está en absoluto aprovechado y nos deja una sensación de vació atroz. En una cinta de Espada y brujería debe existir el personaje bueno y el malo, y en esta dejan de lado al malo real, que es este Malachi, que está genialmente caracterizado, y lo cambian por su guardián, que nos deparará una sorpresa, pero la gran sorpresa es el desuso de grandes personajes.

Por otra parte si bien las luchas tienen fuerza, aquí Basset si demuestra una gran calidad técnica, y las coreografías cumplen, sin ser nada destacables, los enemigos de Kane no dan todo el miedo que se les presupone, parecen unos infectados sacados de la reciente The crazies, 2010, que encima mueren como moscas, aunque siempre tuve la sensación de ver muy poca sangre. Al menos algunos de los efectos especiales son muy poderosos, especialmente los referente a los cristales del final.

El final me dejó con ganas de algo más, quizá el ritmo general fuese tan lento o espasmódico que me hacía pensar en un final más apoteósico, especialmente si lo comparamos con el resto del metraje, pero estaba equivocado. Tenemos una lucha intensa e interesante y poco, muy poco, mas, y eso que el diablo final es genial, aunque muy poco original. La estela de la trilogía del anillo sobrevuela en exceso en esta producción.

Como punto de partida de una trilogía estamos ante un producto algo flojo, cumple debido a que es un producto de fácil visionado y que no arriesga prácticamente nada, pero no complacerá a los aficionados de la espada y brujería de toda la vida. Esperemos que en las posibles continuaciones se atrevan a crear algo propio y dejarse de copias insulsas, y sobretodo que traten de dar carisma a Kane, que es el personaje principal y no deja de ser un mero guerrero abatido por su pasado, de verdad creo que este personaje da para muchísimo mas.

Óscar Arias

La Mansion del Terror - 5.3

5.3

Género; Espada y Brujería- Adaptación Cómic

User Rating: Be the first one !

Busque También

Crítica- Macabre (2009)

Indonesia siempre se ha caracterizado por realizar un cine copiando, demasiado en muchos casos, títulos de éxito de otros países. Así, dentro del género siempre trataron de realizar su cine centrándose en cintas que tuviesen repercusión. Y este es, justamente, el caso que nos ocupa. Los hermanos Kimo Stamboel y Timo Tjahjanto, que se hacen llamar The Mo Brothers, deciden realizar su debut copiando, descaradamente, los cánones del Nouvelle Horror Vague, el nuevo cine gore francés. Aunque se basaron en su cortometraje “Dara” del año 2007, el cual disfrutó de distribución internacional en la película de historias “Takut: Faces of Fear” de 2008.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *