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El debut del australiano Kiah Roache-Turner nos muestra a un fan del cine de género detrás de la cámara. Así, con un presupuesto ajustado decide rodar un híbrido de cine apocalíptico, con Mad Max y sus innumerables explotaciones a la cabeza, y cine zombie con un Mad Doctor sacado del cine ochentero más clásico. Todo con una historia muy básica escrita por él mismo y su hermano Tristan, donde meten algún detalle novedoso y muy interesante que luego os comento.

Ya he perdido la cuenta de la cantidad de largometrajes de género se han realizado bajo la técnica del Found Footage en los últimos años.

El último trabajo del valorado, por méritos propios, Brad Anderson, quién consiguiese grandes críticas con “El maquinista” en 2004, o con “Session 9” en 2001

Grégory Levasseur, guionista de cabecera de Alexander Aja, que le produce esta cinta, por cierto, y responsable de los libretos de “Las colinas tiene ojos”, “Reflejos” o “Alta tensión” da el salto detrás de las cámaras para rodar un guión que no es propio, pequeña sorpresa, ya que pertenece a la dupla Daniel Meersand y Nick Simon, responsables del thriller “Removal” de 2010.

El productor y director Jack Heller decidió realizar su segunda película contando con un guión que formaba parte de la famosa “The Black List (La lista negra)”, lista de los mejores guiones no producidos, de 2009 bajo el título de “The threes” al cual finalmente se le cambió su nombre por el de “Dark was the night”.

La dupla de directores y guionistas Kevin Kolsch y Dennis Widmyer graban su segundo largometraje, prácticamente siempre trabajan juntos, y primero dentro del cine de género. Para ello cogen elementos nada originales, lo cual tampoco es necesario, y los entremezclan para mostrarnos una especie de nueva fábula sobre el mito de Fausto

Hablar de Joe Dante es hablar de uno de los grandes del cine de terror palomitero de los ochenta. Creo que cualquier aficionado conocerá, y si no, no se a que espera, sus “Gremlins”, “Aullidos”, “Piraña”, y “Gremlins 2”, entre otras.

Desde Bélgica nos llega el debut del director Jonas Govaerts, que cuenta con varios cortometrajes a sus espaldas, el cual está consiguiendo buenas críticas con este su debut.

La cadena española de televisión Antena 3, fijándose en el éxito de la serie “Once upon a time” de la ABC, decidió realizar una serie similar en España, “Cuéntame un cuento”, basándose en los clásicos cuentos populares pero bajo un prisma distinto, más oscuro y cercano a la realidad actual. Esta serie está producida por Eyeworks Cuatro Cabezas para Atresmedia y de momento solo se han rodado cinco capítulos, “Blancanieves”, “Caperucita”, “Hansel y Gretel”, “La bella y la bestia”, y este que nos ocupa, “Los tres cerditos”. Siendo todo ellos telefilms de unos 80 minutos de duración.

El cine de Bollywood, el realizado en la India para el que todavía no lo sepa, ha tenido un resurgir enorme con el inicio de este nuevo siglo. Así, si bien su producción estaba destinada para el mercado nacional, y solo se exportaba a países cercanos, en la actualidad es fácil poder encontrar cine de Bollywood distribuido internacionalmente. Lástima que en España no sea tan fácil adquirir cine de este tipo, y menos aún cercano al género.

El cine sobre el nacimiento del anticristo está ciertamente sobado, y hasta límites insospechables. Y es que casi todos los años aparece una, o varias, películas donde vemos el nuevo nacimiento del hijo de Satán. Así aparece esta “El heredero del diablo”, la cual mama, y mucho, de la película de culto “La semilla del diablo” de Roman Polanski. Pero claro, como es de todos sabido, este subgénero está manoseado hasta la saciedad y ya solo queda realizar híbridos con otros géneros o subgéneros para llamar la atención del espectador.

Este nuevo blockbuster norteamericano, de manos de la todopoderosa Warner, se inspiró, nuevamente, en una novela extranjera. En esta ocasión la seleccionada fue “All you need is kill” de Hiroshi Sakurazaka, y el director elegido fue Doug Liman, responsable de varios títulos taquilleros de acción, como “Sr. y Sra. Smith” (2005), “El caso Bourne” (2002), o “Jumper” (2008).

Manuel León Caballero debuta en el largometraje con este pequeño, pequeñísimo, presupuesto. Parece ser que barajaron unas cifras cercanas a los 1.200€, y el propio autor comenta que se rodó sin equipo técnico y en siete días, con un equipo compuesto por siete personas. Por lo que lo primero que se nos pasa por la cabeza es que estamos ante un producto amateur, y para sorpresa nuestra no es así.

Lo primero que he decir es que soy un ferviente admirador y degustador del cine Kaiju desde hace décadas. Por lo que esta nueva incursión estadounidense sobre el mítico saurio japonés, después de la catástrofe perpetrada por Roland Emerich en 1998, no la acabé de encajar demasiado bien.

El actor, guionista y escritor de comics Kevin Grevioux, responsable del libreto de “Underworld” entre otras, creó en 2003 una novela gráfica titulada “I, Frankenstein”, la cual ha sido llevada a la gran pantalla por Stuart Beattie,

Christophe Gans, el director de títulos como Silent hill en 2006, Crying freeman en 1995, o la más afamada El pacto de los lobos en 2005 vuelve a dirigir una película ocho años después. Y para tal menester escogió realizar una nueva versión, y van... , del clásico francés “La Bella y la Bestia”, escrito por Gabrielle-Suzanne de Villeneuve en 1740. Historia que, supongo, es de todos conocida.